El oficio de cuchillero: un acercamiento desde la antropología visual.
Hasta mediados del siglo XX, las calles del centro estaban llenas de obradores, donde se fabricaban diversas tipologías de navajas y cuchillos, con el objetivo de abastecer la demanda local y foránea. De esta industria, otrora famosa en todo el Principado, actualmente queda poco más que el recuerdo. Los pocos talleres activos, como el Pallarès, han mecanizado los procesos productivos, y han tendido a sustituir los materiales nobles (cuerno, maderas, hierro…) por otros más económicos como el plástico y el acero.
El documental está al servicio de una inmersión del espectador en el proceso de fabricación de una navaja. Esto supone una cámara flotante, que nunca se detiene, y que recorre todos los rincones del taller del cuchillero. Asimismo, la cuestión del sonido también participa de esta radicalidad de la puesta en escena. El sonido directo, las máquinas y la respiración del cuchillero son los únicos “ruidos” que uno podría escuchar en el taller. Al final del proceso (cuando se le presentó el vídeo), el cuchillero Enric Pastor comparó la elaboración de un documental con el proceso de fabricación de una de sus navajas, y sólo apuntó una diferencia:
Para hacer una navaja sólo se necesita una persona; para hacer una peliculita… hacen falta tantas!
Realización: Andrés Antebi (realización) & Adrià Pujol (fotografía)
2006/HDV/58’